23º de abono: ¡¡Que pena de novillos!!

La verdad que la decimotercera de abono en la Maestranza ha puesto de manifiesto una cosa: que los novilleros de en día están hartos de lo siguiente: Tener dinero y no tener hambre, tener un apoderado del "ladrillo" para hartarse a gastar en el "niño", tener una cuadrilla que le engañe, tener caradura para dar vueltas al ruedo sin merecerlas, etc........

Y es que la novillada celebrada hoy era para cortarle las orejas a todos, excepto al sexto de la tarde, pero una gran novillada del maestro Cesar Rincon, = El Torreon =. Menudo lujo de novillada para tres novilleros que no han sabido sacarle todo el partido. Excelente el quinto, bueno el primero, con clase el segundo, sin transmisión el tercero, con nobleza el cuarto, y sin clase el sexto son las notas que han caracterizado al encierro.

De los tres novilleros actuantes, el que mas "delito" tiene sea Pedro Carrero, ya que a el le han correspondido los novillos de mas clase del festejo. Sin ideas, lidiando a los toros en tablas, cuando pedían los medios, (se exceptúa el primero por viento molesto en la plaza), y dando muletazos sin darle la importancia adecuada a los novillos. Si hubiese un novillero "con ganas".........se van con cuatro orejas.........

Otro que tiene una "falta" es Salvador Barberan, novillero con altura, que se contradice con lo que ha tenido delante, y a la postre triunfador de la tarde al cortar un oreja al quinto de la tarde. Un novillero que tenia un pitón izquierdo de escandalo, y con el que el novillero se ha sentido a gusto, pero se ha conformado con la orejita......pudiendo cortar dos orejas con mucha fuerza. Lo mejor de la tarde dos series con la mano izquierda de mucho temple y ligazón, y rematadas son dos pases de pecho de impecable colocación. Pero le falto algo mas....y no llego. Se le concedió una oreja, dio la vuelta al ruedo y otra por su cuenta....¡Para matarlo!.

Del mexicano "El Calita", decir que esta muy verde, y que necesita mejorar un poco, sobre todo con la espada. Novillada muy dulce para un novillero muy amargo.