Senegal busca un torero

Decían los aficionados del lugar que cuanto tiempo faltaría para que el «asunto José Tomás» se convirtiera, por quinto año consecutivo, en el tema estrella de opinión entre aficionados y público en general. Y ya está aquí, con polémica incluida. Y esta vez no es culpa de la afición o la prensa, aunque ésta última haya sido la que lanzara el globo sonda a raíz de una comida organizada por la empresa Canorea&Valencia para los periodistas acreditados en Sevilla. 

Me propuse no hablar de José Tomás hasta que no lo viese anunciado en el abono maestrante, pero quizás las supuestas declaraciones del Sr. Canorea – algún periodista me ha confirmado que no las oyó públicamente - en las que ha trascendido la siguiente: «Si para venir a Sevilla José Tomás quiere la recaudación, que se vaya a Senegal» , motivan que haga esta pequeña reflexión. 

Mantengo que dicha declaración me parece desafortunada, porque en primer lugar, decirla en un contexto lúdico-gastrónomico-empresarial, con periodistas del sector, y provocar una reacción de apatía frente a uno de los toreros, que guste o no, se trata de una auténtica figura del toreo – no hace falta promocionar sus éxitos – me parece una falta de talento empresarial por parte de una de las empresas taurinas más importantes del sector, y representando a unas de las plazas de toros más importante del mundo. Y por otro lado, con esa declaración -¿de intenciones? - lo que provoca es la nula capacidad de negociar por su presencia en la Feria, y una falta de respeto al abonado de Sevilla, y a la afición, que guste o no, – y comentarios a favor y en contra habrá – tiene la ilusión y ganas de ver a José Tomás en Sevilla. 

Y es que dejando de un lado las raras estrategias del de Galapagar, y los «caprichos» de su temporada taurina, creo que Canorea parte de conceptos equivocados, y de mantener una cruzada personal con el entorno de José Tomás. 

Aludir a una región pobre de África – por cierto, lugar de costumbre de Canorea para practicar el noble deporte de la caza – para justificar la deriva de dicha negociación es de mal gusto, porque otros empresarios taurinos, más modestos que el de la cita, han sido quizás más diplomáticos, y han firmado una relación jurídica contractual con José Tomás, y en plazas de menor importancia y aforo que la Plaza de Toros de Sevilla. No hace falta decir plazas, - Badajoz, Huelva,..etc.. ¿sigo – han sido enclaves donde el empresariado a contratado a Tomás, sin hacer valoraciones a priori, de recaudaciones o “mamandurrias” para luego terminar su alegato hacia el país del sur de África. Estimo que el problema de José Tomás para venir a Sevilla no se centra sólo en el porcentaje de la recaudación, sino en otros factores empresariales que no José Tomás, ni el principal actor, Canorea, quieren desvelar por el momento. 

Si todo fuese más trasparente, claro y lúcido quizás este manido asunto de la presencia del torero en el abono de Sevilla se hubiera finiquitado cuando en el 2008 tuvo lugar la primera reunión para su contratación, pero los actores principales no quieren dar detalles, y solamente Canorea ha provocado que la afición este ya molesta con el previsible abono de 2014, que otro año más, estará sin la presencia de uno de los toreros que más ilusiona verlo en Sevilla, porque no olvidemos una realidad, la ciudad de Sevilla, y su afición, necesita a Tomás, y toda figura del toreo necesita venir a Sevilla. Mientras tanto habrá que prepararse para viajar a Senegal para ver a torear al diestro madrileño, no vaya ser, que con sus rarezas, tenga la feliz idea de reaparecer allí, a modo de un certamen, «Senegal busca un torero», con lo que me imagino que por espacio y aforo no habrá problema. Por eso ya entiendo que diga Canorea que «el futuro del toreo es oscuro», a lo mejor tenemos que emigrar para ver toros a países tan exóticos como peculiares para ver a José Tomás o presenciar una corrida de toros. Todo se andará.

Foto: Sevillatoro