![]() |
Benjamín Hdez. Montanari |
Tenía ganas de charlar con Benjamín Hernández Montanari, (Madrid, 1965) amigo de la familia, gran aficionado a los toros, y recientemente nombrado Presidente de la Plaza de Toros de Almería. No me ha costado nada rogarle para hacerle unas preguntas para este Blog, no ha puesto reparo alguno, y ha mostrado todas las comodidades del mundo - lo cual agradezco -, y sobre todo no me ha "impuesto condiciones".
Le gusta hablar, explicarse, fundamentar las respuestas, - su lenguaje es siempre correcto, sincero y con criterio - y no ha rehusado «mojarse» sobre aspectos esenciales que se viven en la fiesta, y en Almería concretamente.
Espero que os guste.
Espero que os guste.
Tras finalizar la feria de Almería, y el año taurino en curso dice su adiós, ¿Qué balance hace de sus primeros meses como presidente de los festejos en Almería?
R.- En el novedoso estado de presidir una corrida de toros satisfactorio gracias al grato proceso de aprendizaje de los matices que abarca el festejo taurino. Vivirlo en primera persona, siendo la máxima autoridad, es un privilegio desde la responsabilidad sin haber sentido un ápice de vanidad. En conciencia, he percibido muy buenas sensaciones habiendo momentos de intensa emoción difíciles de explicar. Sin olvidar mi enorme agradecimiento a la Delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía en Almería, Sonia Ferrer, a la entonces Jefa de Juegos y Espectáculos Públicos, Pilar Soriano, y, por supuesto a quien dejaba por iniciativa propia el puesto que ha ocupado durante catorce años, Marco Rubio, que pensaron en mí una vez que diseñaron un perfil para el palco. No me lo esperaba porque jamás me imaginé para tal puesto y, pese a mi resistencia inicial para aceptarlo, ha sido el mayor de los regalos para alguien que siente tanto la Fiesta y ama tanto Almería como yo. No puedo pedir más.
Me consta que por parte de asociaciones y peñas taurinas ha habido, por llamarlo así, cierto «consenso» sobre su nombramiento por parte de la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en Almería:, Dicho acierto le supone ¿más responsabilidad o menos inquietud?
R.- Más que consenso, si me lo permite, lo llamaría “plácet” porque según he sabido fueron pocos los aficionados independientes y representantes de otros sectores los consultados sobre mi persona. Sí, es cierto que han sido muchísimas las felicitaciones recibidas y, además, las he sentido de verdad. Un puesto de tal calibre por sí mismo tiene un matiz de responsabilidad innegable. He sido muy exigente durante cerca de treinta años de crítica taurina porque siempre he querido lo mejor para tan grandioso espectáculo y ahora, desde la presidencia, entiendo que debo llevar a la máxima ese parecer. No puedo fallar. No he sentido miedo escénico cuando he sabido de tantas miradas de aficionados y espectadores pendientes de mis actos. No me lo perdonaría. Es una oportunidad única para desarrollar mi concepto de integridad y pureza y que demanda el aficionado.
Por un sector de la afición y del público almeriense siempre se criticó la falta de criterio, en ciertas ocasiones, en la toma de decisiones del anterior Presidente – Sr. Rubio de Bustos -, y leyendo sus entrevistas concedidas a los medios durante estos meses, parece plantear ciertas ideas innovadoras para ejercer con solvencia y profesionalidad la Presidencia, y quiere un contacto directo con la peñas y asociaciones de la ciudad de Almería. ¿Qué opinión le merece la idea de mantener con los sectores más representativos de la afición, una charla para unificar criterios para determinar la exigencia de la plaza de toros de Almería? Lo digo porque es un anhelo de muchos aficionados de Almería. ¿Lo vería factible?
![]() |
Su primera concesión de premios en Almería |
¿Qué potestad administrativa en materia taurina previa a la lidia le provoca mayor preocupación como Presidente de la Plaza de Toros de Almería? ¿Se sufre mucho en los reconocimientos?
R.- Me preocupan todos sin excepción ya que tengo la convicción que si el Reglamento Taurino de Andalucía los articula es por cuestión motivada. Entiendo la presidencia como una dirección equidistante de los diferentes actores que tienen que moverse al compás de una coreografía cuya única incógnita debe ser el desarrollo de la bravura de los toros y la capacidad de los toreros.
Sinceramente, hasta ahora en mi corto recorrido, no he sufrido nada. Todo lo contrario ya que la predisposición, y comprensión por los errores o mal entendidos que haya podido haber, de todos los equipos conmigo ha sido extraordinaria. Cuestión por lo cual estoy muy agradecido. En el reconocimiento se tiene un gran apoyo de los equipos veterinarios y de delegados de la autoridad sin olvidarnos de la empresa. Ha sido muy fácil pese a que ha habido momentos de tensión que, desde la cordura y el sentido común, se han solventado sin problemas y para bien.
¿Es partidario usted del indulto? ¿Qué criterios debe tener un toro para que merezca ese premio?
R.- Claro que soy partidario. Lo contempla el reglamento siempre desde el punto de vista de la excepcionalidad del comportamiento en bravo del toro, siempre que le acompañe el trapío, siempre con la obligada petición de público, torero y ganadero. Siempre que en conciencia equilibrada crea que el animal lo merece. Siempre con el matiz del comportamiento de cada encaste. Un toro bravo debe ir a más con el incremento del sometimiento. No va a ser fácil que ocurra pero no imposible.
Su perfil de aficionado crítico, de gran sapiencia taurina heredada de familia, con su «aventura» en la Escuela Taurina de Salamanca, donde vivió mucho tiempo, demuestra condiciones muy positivas para saber su personalidad taurina. Debe ayudar todo esa experiencia para estar en el palco y “ajustar” las decisiones a cada caso concreto, ¿no?
R.- Claro. El conocimiento ahuyenta el miedo en las decisiones que se toman. Me siento joven todavía, quizá por las ganas e ilusión que tengo, aunque la experiencia ha sido mucha en este aspecto si bien es cierto que nunca es suficiente. He sido alumno de la primera promoción de la Escuela de Salamanca sin aspiraciones de querer ser torero. He desarrollado mi afición ejerciendo crítica en muchos medios de comunicación. Han sido muchas las conferencias o mesas redondas en las que se ha participado. He vivido la cría del toro muy de cerca. He sido confidente de muchos toreros. Sigo aprendiendo como aficionado práctico. Todo ayuda pero nunca es suficiente ya que la riqueza de la tauromaquia es infinita y en continua evolución. Es el arte con la mayor verdad que se pueda conocer porque no hay partitura ni guion escritos.
Planteó la posibilidad de adoptar determinadas novedades en cuanto la interlocución con los aficionados, y aportar ideas y cambios sustanciales desde la Presidencia de los festejos. ¿Podría decirnos que aportaciones o ideas tiene en mente para la temporada próxima?
R.- Son muchas. Con la experiencia de los primeros festejos debo tamizarlas. Algunas ya las he desechado. Otras han surgido como novedosas. Hay que ir despacio para que paso a dar no sea un traspié. Prometo tenerle informado.
![]() |
Con el Presidente saliente, Marco Rubio de Bustos |
R.- La he sentido mejor en mi época de crítico que ahora en la que no hay que olvidar que hemos tenido momentos de gran tensión porque se publicaron cosas que no le gustaron. Ahora es diferente que cuando iba detrás de la noticia. Repito que creo necesaria la equidistancia de los distintos actores del festejo. Y esto no desmerece que crea que es una gran y seria empresa con independencia de que últimamente los vientos no soplan a su favor. No le gustó el que se nombrara nuevo presidente sin haber sido consultado aunque el trato ha sido cordial en la mayoría de los momentos vividos con mi nuevo rango. No he tenido contacto a la fecha con él desde unos días antes de finalizar la feria. No tengo conocimiento directo sobre sus aspiraciones con Almería o con su labor en el ámbito del empresariado taurino.
Se oye, se rumorea, se comenta por Almería, y por aficionados que la empresa «Martínez Flamarique S.A.» podría estar meditando dejar la Feria de Almería en los próximos años por no ser rentable. ¿Baraja usted esa posibilidad o ha oído ese rumor?
R.- Rumores siempre los hay, comentarios miles, meditaciones en voz alta desde hace unos tres años. Todo es posible. Pero mi opinión es que nadie es sustituible por igual ni nadie es imprescindible. El tiempo dirá. Sí creo que el devenir de lo que ocurra está fuera del círculo de aficionados y público, crítica, profesionales, ganaderos y equipos de autoridad. La definición de lo que pueda pasar está en el ten con ten de la propiedad de la plaza y las instituciones públicas con la empresa.
Y por último, antes de agradecerte esta entrevista para este modesto blog, no quisiera despedirte sin preguntarte la otra faceta personal que requiere su ocio y entretenimiento, la de aficionado práctico. ¿Cómo definiría su toreo? ¿Se vería debutando en público?
R.- ¿Mi toreo? ¡Lleno de defectos! (se ríe a carcajadas) Torear me produce una satisfacción, o frustración en día de malaje, difícil de superar con otras actividades. Me siento muy feliz delante de un animal bravo pese a que cada embestida lidiada arañe y gaste mi alma. Disfruto mucho viendo torear a mis compañeros. Me obsesiona la técnica en la búsqueda de la perfección en el toreo de salón al que me entrego al máximo de lo que mi cuerpo me permite y me gusta sentirme torero en los tentaderos y estudiar a fondo el por qué de cada embestida y cómo resolverla. A veces lo hago con pellizco. Fíjate que a algunos les gusta. ¿Qué más puedo pedir? ¿Debutar en público? Sería una osadía. Una cosa es plantearlo como un acto íntimo y otra es faltar a la consideración de la grandeza del toreo. Además, ¿quién iba a presidir? (más carcajadas). Todo sea que se ofrezca u apoderamiento goloso (más risas).
Pues lo dicho, muchas gracias por esta entrevista, deseándole mucha suerte en esta nueva etapa como Presidente de la Plaza de Toros de Almería.
Fotos: Pérez@larcón y La Voz de Almería

No hay comentarios:
Publicar un comentario