El aficionado taurino: Especie en extinción

Conviene destacar que a pesar de que algunas personas sostienen que la fiesta nacional vive un momento muy bueno actualmente debido a la presencia "activa"?¿ de José Tomás, y el revulsivo taquillero de su vuelta, hay que ser realista y desmitificar todas esas argumentaciones porque realmente, y desde mi punto de vista eso no es así. Las últimas ferias acreditan falta de público e interés, y sobre todo, una falta de respeto "empresarial" hacia el aficionado de verdad. ¡¡Ojo!!, no digo al público, sino al aficionado, a esa persona, que por su trayectoria, su amor a una pasión, deriva un sentimiento en cada momento en al plaza, que lo hace diferente del público, y que sufre por esta fiesta. Los últimos acontecimientos gráficos, atestiguan la falta de ética del sector para con estos aficionados, "afeitando" toros, - Algeciras y Burgos lo atestiguan -, regalando orejas, y con unas vulgaridades artísticas tremendas. Todo ello hace que el aficionado opte por quedarse en casa viendo vídeos taurinos de los últimos tiempos, y recreándose en alguna faena singular, extraordinaria y sin pasar el mal trago de los últimos tiempos; el calor y el engaño del sector.He dicho.