2ª Feria de Almería: También hay crisis...en los novilleros.

Debutaba en esta feria, y lo hacia con cierto optimismo por ver a los novilleros, que dicen ser del gremio que son (o serán) el futuro de la fiesta. Pero la realidad es bien distinta ,lamentablemente y las circunstancias económicas también. Frio en los tendidos y en la taquilla, y daba pena ver los tendidos de sombra de la plaza de toros que antaño era abonada en la más triste soledad, incluidos los 17 palcos que estaban vacios de público. desolador panorama en el ambiente.

Se ha lidiado un encierro muy bien presentado del Marqués de Domecq, de bonitas hechuras, - algunos como toros - y que se han dejado en terminos generales, poniendo las cosas muy dificiles a los novilleros. Importantes, por su casta, el 5º y 6º que en otras manos el aficionado hubiese disfrutado.

Victor Barrio se fue a recibir de hinojos a su primer oponente en el centro del ruedo, con dos largas cambiadas, y una revolera de remate. Con un novillo que le faltaba la fuerza suficiente para embestir, pero haciéndole las cosas mejor le hubiera sacado mejor partido. Anduvo voluntarioso pero sin apreturas y sin ponerse en el sitio oportuno. Vulgar en algunas fases y sin rematar. Tras una estocada algo caída dio una vuelta al ruedo tras la petición no mayoritaria de oreja.

Con el mansito cuarto que desarrolló genio, no mantuvo una línea lidiadora y anduvo con dudas y sin ponerse en el sitio. La vista desparramada del novillo hizo efecto psicológico en el novillero que ha decepcionado en Almería. Con la espada un calvario.

David Galván lanceó con muy buen son a la verónica al segundo bis, y con una exquisita media de buen corte. Maneja el capote con mucha soltura. Con el noble novillo del Marqués, que transmitia por ambos pitones, no estuvo a la altura deseada, y evidenció falta de oficio y técnica. No se colocó por el pitón derecho, y no aprovechó el izquierdo que era para comprarse un cortijo. Con la espada debe mejorar. Se le ovacionó por la bonancible afición de Almería.

Con el segundo de su lote, un "toro", bien hecho, que fue dos veces al caballo por arreones de manso, y que se picó muy mal, se evidenció que su cuadrilla no está para "cocinar" una buena lidia. El toro llegó con genio y fiereza y necesitaba un novillero que dominara la situación. Anduvo arrebatado y tras un cogida sin consecuencias, ni paró, ni templó, y por supuesto no mandó. Un mansito que mereció otra lidia. 
Juan Ortega no justificó su presencia en Almería, y dejo patente su bisoñez y su escasa visión lidiadora. Novillo importante que en otras manos hubiese sido más aprovechado. Con la espada necesita mejorar.

Con el último, un toro que transmitió en el capote, y que permitió el lucimiento del novillero en un quite por chicuelinas y una media de buen corte. El toro pedía distancia y sometimiento, pero Ortega no le aplicó la receta correcta. Mucha voluntad y muy poco oficio que le costó una cornada en el último trasteo de una faena inerte y sin criterio lidiador. Tras una estocada baja, se le pidió con el corazón una benévola oreja al maltrecho novillero, que el Usía, incompresiblemente concedió sin criterio alguno. Y van......

Pico muy bien Antonio Saavedra al 6º de la tarde.

Fotos: Perez@larcon