![]() |
| Fortes al natural |
Parecía que la tarde iba a ser más fresquita y lluviosa de lo que anunciaban los "profetas" cuando a mitad de semana se hablaba que la primera de San Miguel peligraba por el tiempo desapacible y lluvioso. Algo lluviosa - a partir del cuarto toro - ha sido la tarde, pero aún así nos ha dejado presenciar la primera de esta Feria. Con escasa media plaza se ha lidiado un encierro de José Luis Pereda/La Dehesilla, correcta de presentación - excepto el segundo - que se ha destacado en términos generales por su falta de raza y condición, justa de casta, a excepción del tercero de la tarde que ha sido el único toro que ha demostrado algo más de nobleza en la muleta.
Antonio Nazaré no ha podido repetir triunfo en Sevilla, y toda la esperanza en esta tarde para "resolver" el año que viene, debe pesar en el ánimo del torero, pero a decir verdad, no ha tenido tampoco material suficiente, a excepción del tercero de la tarde, que con matices, y hasta que el toro le dejó, hizo lo más torero de la tarde. Con su primero, - sobrero de Pereda - se fue a portagayola para tantear al toro con unas verónicas que motivaron un saludo capotero airoso. Toro protestón que se pico bien, desparramaba algo la vista, y su embestida estaba poco definida. Nazaré anduvo siempre muy firme en una faena que nunca tuvo mas altura por la descastada condición del animal. Con la espada no estuvo atinado, y tras un bajonazo, todo quedó en Silencio.
Con el tercero de la tarde un toro de que tuvo recorrido en el saludo capotero y que manseó en el caballo. Hubo un quite por chicuelinas de Fortes muy ajustado. Tuvo un tranco importante el toro en el tanteo inicial de muleta de Nazaré, y parecía que la faena podría coger altura. Pero tras dos series templadas y muy bien ejecutadas con la mano derecha, las fuerzas del toro decayeron, y la moral del nazareno dilapidaron los tímidos aplausos del respetable. Las cercanias no eran buenas para el animal que aunque con mucha nobleza embestía tras los engaños, Nazaré porfió por ese pitón sin cogerle el aire suficiente al animal. Se diluyo toda probabilidad de sacarle partido a un toro que acabó con las fuerzas justas.
Con el último de su lote apenas pudo sacar alguna conclusión positiva. Un toro que terminó apagándose por la escasa raza del animal. Porfió y puso mucha voluntad en la muleta, pero aquello no despegaba y la pólvora ya estaba mojada, ya que los tendidos eran receptores de la fina lluvia que caía en los tendidos y la gente se preocupaba más pro no mojarse que por la lidia de un toro que apenas trasmitía emoción.
![]() |
| Nazaré a derechas |
El malagueño Jiménez Fortes se fue a portagayola y su saludo capotero tuvo algo de vibración. Toro de feas hechuras, que no alarmó mucho en el caballo, y que presentó nobleza pero escaso de fuerzas. Faena a derechas donde destacaron las primeras series muy firmes y practicando un torero mas relajado. Ahogó demasiado las embestidas y el animal lo termino acusando. Luego llegaron los efectos y alardes amanoletados que no gustaron en el tendido. Tras estocada y dos decabellos fue silenciada su labor.
Con el cuarto de la tarde, Fortes volvió a repetir planteamientos, con otra portagayola emocionante, y ante un toro que acabó rajado en tablas y demostrando una falta de raza y clase alarmante. Faena sin los ajustes deseados, con excesivos pases sin criterio que a punto estuvieron de mandarlo a la enfermería por su falta de colocación.
Con el último, otra cita en la puerta de chiqueros, y solamente hay que destacar unas chicuelinas y una media de rodillas que tuvieron algo de emoción. Sin mucha pelea en el caballo, su raza y descastadas embestidas no daban esperanzas. Su faena empezó sin la intensidad deseada, y terminó por aburrir al personal.
En resumen, una tarde donde los toreros traían «armas y fundamentos» para que su futuro se arreglara esta tarde, pero esta vez ni el guión ha sido el deseado, ni el contenido ha tenido motivos para la alegría, por culpa del escaso juego de los toros de Pereda, que no han permitido mayor lucimiento de los toreros.
Fotos: Ignacio Tallón


No hay comentarios:
Publicar un comentario